General Madariaga 2098, Sarandí.
Avellaneda. Provincia de Buenos Aires
Argentina
El proceso FRANKI se inicia con el hincado del tubo FRANKI, dentro del cual se desliza un pesado pilón que permite el posterior hincado en los distintos tipos de suelos. La elevada potencia de hincado es obtenida por la gran altura de caída del pilón.
El proceso FRANKI se inicia con el hincado del tubo FRANKI, dentro del cual se desliza un pesado pilón que permite el posterior hincado en los distintos tipos de suelos. La elevada potencia de hincado es obtenida por la gran altura de caída del pilón.
El proceso FRANKI se inicia con el hincado del tubo FRANKI, dentro del cual se desliza un pesado pilón que permite el posterior hincado en los distintos tipos de suelos. La elevada potencia de hincado es obtenida por la gran altura de caída del pilón.
El proceso FRANKI se inicia con el hincado del tubo FRANKI, dentro del cual se desliza un pesado pilón que permite el posterior hincado en los distintos tipos de suelos. La elevada potencia de hincado es obtenida por la gran altura de caída del pilón.
El proceso FRANKI se inicia con el hincado del tubo FRANKI, dentro del cual se desliza un pesado pilón que permite el posterior hincado en los distintos tipos de suelos. La elevada potencia de hincado es obtenida por la gran altura de caída del pilón.
Estos pilotes inyectados y llenados “insitu” tienen su origen en trabajos de refuerzo de fundaciones en los años cincuenta en Italia. Las técnicas empleadas de presurizar la mezcla cementicia causan un fuerte aumento de fricció no de adherencia entre el fuste del pilote y el suelo, muy superior a los pilotes perforados usuales.
Estos pilotes inyectados y llenados “insitu” tienen su origen en trabajos de refuerzo de fundaciones en los años cincuenta en Italia. Las técnicas empleadas de presurizar la mezcla cementicia causan un fuerte aumento de fricció no de adherencia entre el fuste del pilote y el suelo, muy superior a los pilotes perforados usuales.
La carga admisible de estos pilotes perforados con la punta apoyada en el suelo, por fricción lateral del fuste no puede ser inferior al 80% de la carga de trabajo del mismo, y la resistencia total no puede ser inferior a dos veces dicha carga.
La carga admisible de estos pilotes perforados con la punta apoyada en el suelo, por fricción lateral del fuste no puede ser inferior al 80% de la carga de trabajo del mismo, y la resistencia total no puede ser inferior a dos veces dicha carga.
Usando la misma técnica es posible ejecutar cortinas de pilotes perforados tangentes o secantes que además de la función de soporte suman también la de contención o de estanquidad (ej.:muros de contención, fosa de gran profundidad, estacionamiento subterráneo, etc).
Este tipo de pilote relativamente nuevo, es similar a los muros colados y sigue patrones de diseño especiales para adaptarlos a situaciones diversas.
La Norma brasilera define como muro colado de fundación profunda el ejecutado por excavación mecánica, con uso o no de lodo bentonítico o con uso de revestimiento total o parcial y con hormigonado posterior.
Este material es la clave de las fundaciones por excavación, porque a partir de sus propiedades tixotrópica y de sellado permite soportar la excavación, impidiendo la pérdida de barro en el suelo.
General Madariaga 2098, Sarandí.
Avellaneda. Provincia de Buenos Aires
Argentina
